Un nuevo estudiante se acercó al maestro de Zen, y le preguntó cómo debería prepararse para su instrucción. “Piense que soy una campana”, explicó el maestro, “Deme un golpecito suave, y obtendrá un pequeñísimo tintineo; golpéeme con fuerza, y recibirá un estridente y sonoro repique”.
14 agosto 2009
El profesor campana
Un nuevo estudiante se acercó al maestro de Zen, y le preguntó cómo debería prepararse para su instrucción. “Piense que soy una campana”, explicó el maestro, “Deme un golpecito suave, y obtendrá un pequeñísimo tintineo; golpéeme con fuerza, y recibirá un estridente y sonoro repique”.
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